Acabo de terminar de leer la compilación que hizo Alberto Fuguet de escritos de Andres Caicedo para formar una autobiografia. Libro duro y deprimente, ese pobre Caicedo era un verdadero fragilino.
Casi un año antes de tener éxito en quitarse la vida con 60 pastillas de Seconal, escribió esto:
No puede ser que sufra tanto
no puede ser que los días sean así de polvo
no puede ser que la muerte llegue así de rápido
que los recuerdos sean plomo derretido
en estos ojos blandos
que los mitos se derrumben
como soplar casas hechas de paja
no puede ser que día tras día
no puede ser que sufra tanto
no puede ser que los días
no puede ser que la muerte
no puede ser que los recuerdos
en estos ojos blandos
que los mitos
que dia tras día
no puede ser que sufra tanto.